jueves, 2 de marzo de 2017

LA SECUELA.

Por: Engelbert Rivero Montenegro
Sec. de Asuntos Municipales AD Carabobo.


El 1 de Enero de 2008 se dio inicio a una nueva escala monetaria de curso legal en Venezuela, durante esa etapa de transición de un año, circularon juntos el bolívar (bs) y el llamado bolívar fuerte.

Recuerdo que desde el Gobierno manifestaban que el propósito general de la llamada reconversión monetaria emprendida por el BCV y el Ejecutivo Nacional era fortalecer la moneda y reafirmar el objetivo de estabilidad de la economía, en el marco de un conjunto de políticas orientadas a favorecer el desarrollo económico-social del país.

Aquella excéntrica medida permitiría según los instruidos de las finanzas publicas del chavismo lograr mayor eficiencia en el sistema de pago, que se vería favorecidos con el manejo de cifras mas pequeñas, lo que facilitaría tanto las operaciones comerciales y el calculo de todas las transacciones económicas, como los registros contables. En ese mismo orden de ideas aquel cambio reforzaría la confianza en el signo monetario y seria un reflejo de la fortaleza de la economía nacional.

Obvio, en aquel año ya nadie pensaba que los mismos creadores de los gallineros verticales, fundos zamoranos, ruta de la empanada y destrucción en PDVSA iban a lograr mejoras en la economía con medidas coyunturales como la llamada reconversión

El desmadre económico que nos agobia a los venezolanos producto del rotundo fracaso del garabato chavista en pleno boom petrolero tuvo entre otras causas privilegiar el sesgo ideológico en la toma en decisiones de carácter económico y pensar que por decretos, por medidas improvisadas, como la reconversión monetaria, la no publicación de los índices de inflación por parte del BCV, el control de cambio, el control de precios, la inamovilidad laboral, aumentos recurrentes del salario mínimo o el cambio del cono monetario abatirían la inflación que dicho sea de paso aguas abajo se sentiría con mayor fuerza en la vida diaria de los ciudadanos, que poco a poco vieron mermada su capacidad adquisitiva.

Hay que recordar que según el BCV y el INE el año 2008 cerro con una inflación de 30.9% lo que convirtió a nuestro país por tercer año consecutivo en líder de ese pernicioso renglón en la región.

Ahora bien si usted en este momento abre la pagina del BCV en el link donde se publica el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) notara que solo esta publicado hasta el 2015 pensando que con eso ocultan una realidad que es mas que evidente sobre todo en el sector de alimentos que dicho sea de paso ocupa el primer lugar entre los problemas que mas agobian a los Venezolanos

A comienzo de este año ya se habla de una inflación de 800% en productos regulados y de 1600% en productos no regulados, es decir la depreciación de la moneda es mucho mayor que en la del 2008 así que en nada nos extrañe que los hechiceros, brujo y paleros que tienen como asesores les sugieran el establecimiento de la secuela de una nueva reconversión monetaria.

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